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El mundo de la fabricación está experimentando una transformación significativa, y en el centro de este cambio se encuentra la extraordinaria tecnología de la impresión 3D. Pero la impresión 3D ya no es sólo para crear baratijas de plástico. Se está introduciendo rápidamente en el ámbito de la metalurgia, especialmente con la impresión 3D de polvo metálico en moldes de acero.

Acero inoxidable. El propio nombre evoca imágenes de fuerza, resistencia y un toque de elegancia moderna. No es de extrañar, por tanto, que este maravilloso material se haya abierto camino en el vanguardista mundo de la impresión 3D. Pero, ¿en qué consiste exactamente el polvo metálico de acero inoxidable para impresión 3D? Abróchese el cinturón, porque

El mundo de la impresión 3D se ha disparado en los últimos años, revolucionando la forma en que diseñamos y fabricamos de todo, desde juguetes hasta prótesis. Pero, ¿alguna vez se ha parado a preguntarse cuál es el ingrediente mágico que nos permite construir complejos objetos metálicos capa a capa? La respuesta está en el corazón

La fabricación aditiva (AM), también conocida como impresión 3D, ha revolucionado la forma de crear componentes metálicos complejos. Pero dentro de este apasionante ámbito destacan dos titanes: La fusión selectiva por láser (SLM) y la fusión por haz de electrones (EBM). Ambos utilizan una técnica de fusión de lecho de polvo, pero su funcionamiento interno revela diferencias fascinantes. Veamos

La fusión por haz de electrones (EBM) ha surgido como una fuerza revolucionaria en el mundo de la impresión 3D, permitiendo la creación de piezas metálicas complejas y de alto rendimiento. Pero, ¿qué es exactamente la EBM y cómo funciona? Esta completa guía se adentra en los entresijos de la tecnología EBM, explorando sus principios básicos, la

Imagine crear piezas metálicas complejas capa a capa, con una precisión y complejidad sin precedentes. Esa es la magia de la tecnología de fusión por haz de electrones (EBM), un revolucionario proceso de impresión 3D que está transformando la fabricación. Pero en el corazón de esta innovación se encuentra un ingrediente crucial: los polvos metálicos. Pero no vale cualquier polvo metálico,